Es como un sueño… ¿no? Hace poco, de camino al trabajo, escuché un relato en el programa de radio Marketplace acerca de las semanas de cuatro días laborables. Según la más reciente Encuesta de Investigación Edison de Marketplace, casi dos terceras partes de los trabajadores encuestados dijeron que preferirían una semana de cuatro días laborables con días de diez horas en lugar de la semana estándar de cinco días laborables de ocho horas. Supongo que el atractivo de la semana de cuatro días depende de la naturaleza del trabajo. Para mí, la idea de que se acumule el trabajo en mi ausencia y que me tenga que “poner al día” – cada semana – me crearía más estrés que beneficio. Aparte del problema de balancear el flujo continuo de trabajo, el relato de Marketplace me hizo pensar acerca de las implicaciones legales laborales de una semana de cuatro días laborables de diez horas.
La Ley Federal de Normas Laborales Justas (conocida también como “FLSA” por “Fair Labor Standards Act”) exige a los empleadores que paguen horas extraordinarias (“overtime”) al empleado no exento que trabaje más de cuarenta horas en una semana laborable. La semana de cuatro días laborables de diez horas no debería de dar lugar a un problema con esta ley, a no ser que el empleado no exento esté “secretamente” trabajando en su día libre. Sin embargo, muchos estados tienen leyes que rigen los salarios y los horarios y que exigen se paguen las horas extraordinarias si el empleado trabaja más de ocho horas en un día. A no ser que se reformen las leyes de esos estados, los días laborables de diez horas podrían resultar en una obligación de pagar horas extraordinarias, incluso aunque el empleado trabaje cuarenta horas en la semana.
Los días laborables de diez horas presentan un problema administrativo en virtud de las leyes que rigen las licencias de ausencia, tal como Ley de Licencia Médica y Familiar. Si el empleado se toma una semana completa de licencia en virtud de esta ley o múltiples semanas completas de licencia… usted cuenta sencillamente el número de semanas de ausencia tomadas contra las 12 (o 26) semanas de licencia a las que el empleado tiene derecho. Sin embargo, cuando el empleado se toma el tiempo de licencia en incrementos de menos de una semana completa, la semana de cuatro días laborables de diez horas le puede exigir al empleador que ajuste cómo calcula el tiempo de licencia a que se tiene derecho. La División de Salarios y Horarios del Departamento del Trabajo de los EE.UU. dispone la siguiente orientación en su Hoja de Datos [Fact Sheet] #28I:
Cuando un empleado se toma tiempo de licencia basado en la Ley de Licencia Médica y Familiar de menos de una semana completa, la cantidad de tiempo que se use según esta ley se determina como una proporción de la semana laborable en sí del empleado. La cantidad de tiempo de licencia que se tome en virtud de la “FMLA” se divide por el número de horas que el empleado habría trabajado si no se hubiera tomado ningún tipo de licencia (que incluye la licencia de la “FMLA”) para determinar la proporción de la semana laborable usada según la “FMLA”. . . . El empleador puede convertir el tiempo usado de licencia de la “FMLA” en horas siempre y cuando esto refleje justamente la semana laborable en sí del empleado.
Cuando lidie con una semana de cuatro días laborables de diez horas, tal vez sea más fácil convertir las 12 semanas de ausencia a las que se tiene derecho en 480 horas y llevar cuenta del tiempo de licencia que se tome en términos de horas, especialmente con los empleados que se tomen licencia intermitentemente o por tiempo reducido. Por ejemplo, en el caso de un empleado que use dos días (20 horas) de licencia en una semana en virtud de la Ley de Licencia Médica y Familiar, usted puede restarle 20 horas a tiempo total de licencia de 480 horas en lugar de poner que el empleado usó 1/2 de una semana (20 horas de una semana de 40 horas) del tiempo de licencia que permite esta ley.
Quizá la semana de cuatro días laborables no se va a convertir en realidad en el futuro inmediato. Si su lugar de trabajo está considerando hacer el cambio a la semana de cuatro días de diez horas. tenga presente que esto puede dar lugar a implicaciones legales laborales.